Quizá sea éste el último artículo del curso. Como los cursos pasados, en el verano se irá escribiendo de vez en cuando y ampliando un poco la temática: mis pajaricos, los atropellos de Gran Scala, Ansó, la desidia occidental (no accidental) ante el drama del tercer mundo, etc. Las preocupaciones de uno, en definitiva.
El curso próximo habrá mucho que contar, puesto que empieza una nueva vida en la que hay que volver a aprender casi todo. También espero que el compañero de fatigas haya recargado la pluma y vuelva a contar sobre su escuela y su vida.
Ahora os muestro el regalo que entregaré el viernes a los niños de mi clase de Peñarroya, justo antes de emprender viaje. No les digáis nada, que es una sorpresa.
El curso próximo habrá mucho que contar, puesto que empieza una nueva vida en la que hay que volver a aprender casi todo. También espero que el compañero de fatigas haya recargado la pluma y vuelva a contar sobre su escuela y su vida.
Ahora os muestro el regalo que entregaré el viernes a los niños de mi clase de Peñarroya, justo antes de emprender viaje. No les digáis nada, que es una sorpresa.
Gracias a todos por la compañía y las aportaciones.
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