Anoche salimos a las 18h30' de la plaza como estaba previsto. Resultó que la convocatoria inicialmente hecha a mi clase se extendió a toda la escuela, y finalmente acudieron veintitrés de los veintiocho niños disponibles, lo que me parece un gran éxito y una enorme alegría.
Los niños esperaban la salida mirando con los prismáticos, pasándolos de unos a otros, buscando pájaros u objetos lejanos para intentar afinar la vista y observarlos, etc. La plaza del pueblo era un espectáculo. De camino al lugar de la observación el pretendido silencio se convirtió en un bullicio quizá excesivo, y cerca del destino tuvimos la enorme suerte de contemplar un grupo de cabras con varios machos luchando entre sí, a cabezazo limpio, en busca del liderazgo y de las mejores hembras. Un espectáculo que muchos niños contemplaron por primera vez, con el añadido de tener un montón de prismáticos disponibles para analizar mejor los detalles. Después más carreras, gritos, y a esperar.
Esperamos a la luna. Y la Luna no llegó. La semana pasada perdí mi librito de Mariano Castillo, y no sabía la hora exacta de salida del astro hermano. El caso es que tras esperar mucho tiempo tuvimos que irnos sin verla (salía a las 21h15'). Una tremenda pena. A pesar de todo, los niños se lo pasaron muy bien, puesto que no tienen muchas ocasiones para jugar en el campo durante la noche, con linternas, mil estrellas, y una hoguera dando un poquito de luz y calor (un abuelo pastor nos acompañó, y ...). Falta de previsión por mi parte. Un fallo que no debí cometer.
La maestra de educación especial se ha casado con otro maestro del CRA. Éste último ha sido sustituido inmediatamente, pero la maestra de educación especial no. No sé qué demonios de perfil de plaza, de terminología, de plaza singular o…; el caso es que la administración saca la plaza sin que sea obligatorio aceptarla, y ningún interino ha estimado oportuno trabajar más de un mes (1600 euros, la experiencia, los puntos…). Consecuencia: las ocho o diez horas semanales en las que mi alumno discapacitado contaba con una persona que le atendía adecuadamente se diluyen entre papeles y burocracias. El alumno estará este tiempo desatendido, un poco más, y controlar su comportamiento, atención, aburrimiento, interferencias en las clases, etc., será un poco más complicado. Brillantes ideas educativas.
Nuestra colección naturalista sigue creciendo. Hoy con lo que parece ser un cráneo de gato, así como con dos viejas piezas disecadas de oropéndola y cárabo (el ulular del cárabo…). Tenemos la costumbre de enseñar en el resto de clases algunas de las cosas que van circulando por la nuestra. Básicamente porque a los otros niños les gusta, aprenden, y a mis alumnos les sirve para hacer un esfuerzo comunicativo y explicar los aspectos que rodean lo enseñado. Hoy en una clase, a la expectación y curiosidad de los niños le ha acompañado la cara de asco del adulto-a que en ese momento les hacía compañía. Hay un dato que tiñe a la cuestión de mayor dramatismo, pero da igual. ¿Quién hace dejar de fumar con un puro en la boca?, ¿Puede enseñar hábitos alimenticios saludables una persona enferma de anorexia?, ¿Puede enseñar a mirar el mundo una persona que hace ascos a buena parte de ese mundo?, ¿por qué no hacen algún examen de esto en magisterio, o en alguna parte?.
Nuestra historia de esta semana se apoya en otra de esas pequeñas joyas de Aula Libre (gracias otra vez). He leído a los niños siete comienzos de historias, han elegido la que más les gustaba, y les he propuesto escribir esas cinco o seis líneas iniciales para luego dirigir la historia por el camino que eligiesen. Han elegido “El Canto de las Ballenas”, de Sheldon y Blythe: “La abuela de Lili comenzó así su […] eran las más extraordinarias criaturas que jamás podrías imaginar”. Intentaré conseguir el librito, leerlo, traducirlo al idioma de los duendes, y el lunes veremos en qué consiste realmente esta historia y en qué consisten sus relatos. Veremos qué diferentes son unos y otros y hablaremos sobre ello.
También hemos aprovechado unos minutos de proyector que conseguimos robar a los de tercer ciclo para enviar unas preguntas a un foro de internet (http://www.elornitólogo.com/) sobre naturaleza. Espero contar con la generosidad de sus usuarios, y mañana mostraré a estos pequeños hombres las respuestas que nos han ofrecido.
Los niños esperaban la salida mirando con los prismáticos, pasándolos de unos a otros, buscando pájaros u objetos lejanos para intentar afinar la vista y observarlos, etc. La plaza del pueblo era un espectáculo. De camino al lugar de la observación el pretendido silencio se convirtió en un bullicio quizá excesivo, y cerca del destino tuvimos la enorme suerte de contemplar un grupo de cabras con varios machos luchando entre sí, a cabezazo limpio, en busca del liderazgo y de las mejores hembras. Un espectáculo que muchos niños contemplaron por primera vez, con el añadido de tener un montón de prismáticos disponibles para analizar mejor los detalles. Después más carreras, gritos, y a esperar.
Esperamos a la luna. Y la Luna no llegó. La semana pasada perdí mi librito de Mariano Castillo, y no sabía la hora exacta de salida del astro hermano. El caso es que tras esperar mucho tiempo tuvimos que irnos sin verla (salía a las 21h15'). Una tremenda pena. A pesar de todo, los niños se lo pasaron muy bien, puesto que no tienen muchas ocasiones para jugar en el campo durante la noche, con linternas, mil estrellas, y una hoguera dando un poquito de luz y calor (un abuelo pastor nos acompañó, y ...). Falta de previsión por mi parte. Un fallo que no debí cometer.
La maestra de educación especial se ha casado con otro maestro del CRA. Éste último ha sido sustituido inmediatamente, pero la maestra de educación especial no. No sé qué demonios de perfil de plaza, de terminología, de plaza singular o…; el caso es que la administración saca la plaza sin que sea obligatorio aceptarla, y ningún interino ha estimado oportuno trabajar más de un mes (1600 euros, la experiencia, los puntos…). Consecuencia: las ocho o diez horas semanales en las que mi alumno discapacitado contaba con una persona que le atendía adecuadamente se diluyen entre papeles y burocracias. El alumno estará este tiempo desatendido, un poco más, y controlar su comportamiento, atención, aburrimiento, interferencias en las clases, etc., será un poco más complicado. Brillantes ideas educativas.
Nuestra colección naturalista sigue creciendo. Hoy con lo que parece ser un cráneo de gato, así como con dos viejas piezas disecadas de oropéndola y cárabo (el ulular del cárabo…). Tenemos la costumbre de enseñar en el resto de clases algunas de las cosas que van circulando por la nuestra. Básicamente porque a los otros niños les gusta, aprenden, y a mis alumnos les sirve para hacer un esfuerzo comunicativo y explicar los aspectos que rodean lo enseñado. Hoy en una clase, a la expectación y curiosidad de los niños le ha acompañado la cara de asco del adulto-a que en ese momento les hacía compañía. Hay un dato que tiñe a la cuestión de mayor dramatismo, pero da igual. ¿Quién hace dejar de fumar con un puro en la boca?, ¿Puede enseñar hábitos alimenticios saludables una persona enferma de anorexia?, ¿Puede enseñar a mirar el mundo una persona que hace ascos a buena parte de ese mundo?, ¿por qué no hacen algún examen de esto en magisterio, o en alguna parte?.
Nuestra historia de esta semana se apoya en otra de esas pequeñas joyas de Aula Libre (gracias otra vez). He leído a los niños siete comienzos de historias, han elegido la que más les gustaba, y les he propuesto escribir esas cinco o seis líneas iniciales para luego dirigir la historia por el camino que eligiesen. Han elegido “El Canto de las Ballenas”, de Sheldon y Blythe: “La abuela de Lili comenzó así su […] eran las más extraordinarias criaturas que jamás podrías imaginar”. Intentaré conseguir el librito, leerlo, traducirlo al idioma de los duendes, y el lunes veremos en qué consiste realmente esta historia y en qué consisten sus relatos. Veremos qué diferentes son unos y otros y hablaremos sobre ello.
También hemos aprovechado unos minutos de proyector que conseguimos robar a los de tercer ciclo para enviar unas preguntas a un foro de internet (http://www.elornitólogo.com/) sobre naturaleza. Espero contar con la generosidad de sus usuarios, y mañana mostraré a estos pequeños hombres las respuestas que nos han ofrecido.