Me pregunto si dudará sobre la escuela, sobre su vida, sobre el futuro, ...
Tras tres días de trabajo, la novedad aparece en casi cualquier elemento de la escuela. Ando despistado y desorientado y siento cierta angustia con origen en varias causas. De cualquier modo, estoy contento por el ambiente de trabajo e implicación que se respira en la escuela.
Lo grave radica en que las dudas y despistes se han de disipar en dos días, puesto que el lunes ya acuden los niños a la escuela. ¿A alguien más le parecen insuficientes cinco días de trabajo para organizar el curso?.
Comparto la tutoría de un aula con una compañera. Serán seis niños los que cruzarán sus vidas con la mía, a los que trataré de ayudar y los que me transformarán en otro diferente.