viernes, 11 de enero de 2008

ESTOY MEDIO ESCONDIDO.


De igual modo que el sapo que ahora llevaremos al campo para que siga su vida de anfibio, estoy escondido, medio enterrado, a la espera de que las condiciones de temperatura y humedad me permitan asomarme al mundo.

El día veintidós de febrero se celebrarán en Huesca el XI Seminario Internacional de Praxiología Motriz. En el mundo de la Educación Física, hasta donde sé, la praxiología representa una corriente importantísima que en la actualidad permite la constitución de un área curricular con un cuerpo epistemológico real y auténtico, un área con sentido y utilidad, en definitiva. De hecho, muchas prácticas en la escuela aragonesa ya están impregnadas de los principios y fundamentos de la praxiología motriz, y, por desgracia, se quedó a las puertas de nacer el currículum aragonés que giraba en torno a la misma.

En las jornadas hablarán ponentes como Alfredo Larraz, Francisco Lagardera, y Pierre Parlebas, el padre de la criatura. Con esta representación, aunque el tema fuera sobre la reproducción del gorgojo, merece la pena asistir.

En la escuela el tiempo ha doblado la velocidad, y mis energías han menguado sustancialmente. Esta primera semana he procurado crear algunas sorpresas y alegrías, pero no he conseguido los efectos pretendidos, y en frecuentes ocasiones el grupo no funciona como yo desearía. En todo caso, en lo positivo puedo contar que cada día tengo más claro lo que es importante y lo que es accesorio o, más aún, de relleno. El problema surge cuando descubro que la mayor parte es puro relleno.