martes, 9 de abril de 2013

OTRO QUE NO DEBÍA.


Si la memoria no me engaña, creo que el suyo es el único autógrafo que tengo en casa. Tuve la profunda fortuna de escucharle en directo en Jaca. 

Su peor fallo, como el de Saramago hace también poco tiempo, ha sido morirse. Con la muerte de Labordeta leí lo de todos los buenos se mueren antes de tiempo. Amarga verdad.

Este blog se declara de luto permanente ante el fallecimiento de un autor que tanto me ha hecho aprender y disfrutar. Siempre tendré rondando por la cabeza La senda del drago ante la posible pregunta acerca de un libro favorito. Y los diálogos con el médico Valentín Fuster, rebosantes de vida y humanismo.

¡Viva en la memoria José Luis Sampedro!

4 comentarios:

Joselu dijo...

Has citado a tres hombres de bien y sabios (Saramago, Labordeta, Sampedro), hombres que se fueron discretamente pero que dejaron una honda huella en todos los que los conocimos. Frente a los fastos de la vedette que no supo vivir su vejez como lo que era y era cada vez más vieja y fea, ahí tenemos a Sampedro que cada vez era más joven y guapo, o al menos así nos lo parecía su pensamiento crítico y sus palabras que nos alentaban a no resignarnos.

Yolanda dijo...

Se mueren los buenos, es verdad, personas lúcidas, inteligentes y nada presuntuosas que hablaban con calma y precisión, con tremenda claridad, de la vida, el hombre, la crisis, los valores, la educación, la solidaridad, la democracia... No iban de listos ni de chulos, no buscaban salir en portada ni fotografiarse con los poderosos. Mencionas a tres personas impresionantes, personas cuya ausencia empobrece este mundo. Nos quedan sus palabras, sus ideas. Ahora más que nunca hay que recordarlas.
Un abrazo.

Amparito dijo...

Yo lo conocí en el curso sobre su vida que se hizo en Jaca al que tuve la fortuna de asistir
Después de escuchar literatos, economistas y demás personas que fueron hablando sobre él, salió el con todos su años y sorprendió a todos
¿sabeis como se definió a si mismo?
Como un aprendiz
Me encantó. Era como mi madre (que murió también esta semana) siempre aprendiendo y pensando por si mism@s
Nos quedan sus pensamientos y su obra

Kikiricabra dijo...

Me alegra mucho coincidir con vosotros sobre la figura de Sampedro. De cualquier forma, una de las virtudes de estas personas que hemos nombrado ha sido la de generar en la sociedad consenso generalizado en torno a su genialidad y valor. Pocos pueden poner (o se atreven a ello) peros a sus trayectorias.

Un abrazo para cada uno.

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