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Ahí, por la derecha, ya se aprecia la llegada del fin del mundo.Si finalmente el asunto torero se integra en el ministerio de Cultura, tendremos la evidencia incuestionable de que el fin del mundo es inminente y la humanidad ha entrado en una espiral de estupidez sin freno ni remedio.
Por mi parte, supongo que en los currículos educativos tendrán que incluir el toreo: historia, arte y estética de la faena, héroes de ayer y hoy; supongo que yo acabaré haciendo unidades didácticas sobre el Juli y el Muchachito de la Puebla. Y ensayaré con los alumnos el manejo del estoque y el capote.
Supongo también que la SGAE tendrá que estar al tanto y cobrar la tasa correspondiente a todo el que lleve cuernos o derivados, e incluso al que se atreva a exclamar un "olé" en contexto distinto al taurino.
Qué divertida es la vida.
2 comentarios:
Piensa en la parte positiva. Si entra en el curriculo, podrás seguir ejercienciendo poder sobre esas mentes ávidas de aprender lo que un maestro "marciano" quiera enseñarles. Aprovecha tu poder.
Vente arriba, yo quiero un maestro como tú para mis hijos, aunque sean africanos y no sepan de "folklore español". Abajo los toros!!!!! y arriba los buenos maestros!!!!!
Hola, Anónimo.
Sí, todo tiene pate positiva. Todo tiene parte negativa. Casi todo tiene partes.
Hace unos años un maestro bromeaba sobre la informalidad de los currículos educativos diciendo que al final se veía haciendo unidades didácticas de toros y vaquillas. Y lo justificaba a la perfección (temas transversales, transferencias de conocimientos con otras áreas, etc.) Finalmente podrá hacer sus unidades de toreo con total legitimidad.
Quizá sea buena idea esa de ser maestro africano.
Un saludo.
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